La Navidad reclama una escapada a la nieve y Grandvalira, el dominio esquiable más grande de los Pirineos, es la elección de los más aventureros. Grupos de amigos y parejas se deciden a pasar unas vacaciones blancas en Andorra con el objetivo de disfrutar de muchas sensaciones más allá del esquí. Esta Navidad, Grandvalira estrena nuevas experiencias y amplia así las opciones de diversión. Además, el ocio no se acaba en la montaña, por la tarde, el país ofrece multitud de fórmulas para acabar la jornada con un plan relajante o de compras por uno de los centros comerciales más importantes del sud de Europa: Andorra, un país donde encontrar productos de los cinco continentes.
PLAN 1.
Para los que siempre quieren ser los primeros: ¡el First Track o primera nieve!
La primera nieve convoca a los esquiadores más apasionados y es la actividad ideal para aquellos que quieren estrenarlo todo y ser los primeros en bajar por las pistas. La actividad empieza a primera hora de la mañana, justo antes de la apertura del dominio al público.
EL SEGUNDO PLAN.
Para los que quieren ver el mundo a vista de pájaro: ¡el ballooning!
Grandvalira estrena el ballooning, vuelos en globo aerostático, una de las novedades de esta temporada, permiten descubrir los rincones más sorprendentes de Grandvalira flotando silenciosamente en el aire. La duración del vuelo es de 1h30min y se hace un recorrido desde Grau Roig hasta la Cerdeña.
3er PLAN.
Para los más valientes: ¡una sesión de heliesquí!
Para los amantes del deporte extremo y la aventura, las Heliski Sessions Grandvalira son la fórmula más rápida para aprovechar al máximo los descensos. Fuera de todos los terrenos abalizados, esquiadores y snowboarders podrán disfrutar de la esencia del deporte blanco, de la naturaleza y de la nieve a la vez que se descubren paisajes sorprendentes. El ascenso se hace desde el Pla de Espiolets (Grandvalira-Soldeu) hasta El Pic la Coma de Varilles a 2.760m.
PLAN 4.
Para los que quieren dejar huella: ¡el ski ratrac o las motos de nieve!
Otra manera de realizar una bajada vertiginosa es el Ski ratrac. Una máquina ratrac de condicionamiento de pistas remolca a los esquiadores y snowboarders hasta el Pic de Encampadana (Grandvalira-El Tarter) para llegar a los puntos que dan acceso a los mejores descensos fuera pista. Está limitada a expertos y se realiza bajo la supervisión de un monitor, con todas las medidas de seguridad.
Una manera diferente de disfrutar de la nieve es con las actividades de motor. Adrenalina al 100% sobre dos ruedas! Para los amantes del motor, Grandvalira brinda la posibilidad de conducir motos de nieve por los bosques de las valles. Se puede disfrutar de esta experiencia en Grandvalira-Garu Roig y en el circuito de Grandvalira-Soldeu. Y, esta temporada, también se puede realizar de noche! ¿Hacemos una carrera?
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